Menos de una semana después del sismo de magnitud 8,8 que sacudió el este de Rusia, el volcán Krasheninnikov, ubicado en la península de Kamchatka, entró en erupción este sábado tras más de 400 años sin registrar actividad. Las autoridades asignaron el código “naranja” de peligro aéreo y emitieron una alerta a los operadores aeronáuticos por una columna de ceniza que alcanzó los 6.000 metros de altura.

La explosión volcánica, la segunda en la región tras el reciente terremoto, activó el monitoreo intensivo del Ministerio de Situaciones de Emergencia y del Centro de Avisos de Cenizas Volcánicas de Tokio, que advirtió sobre el riesgo para la navegación aérea en la zona del Pacífico norte.

El Krasheninnikov está conformado por dos estratovolcanes superpuestos dentro de la Reserva Natural Kronotsky, al sur del lago Kronotskoye, y debe su nombre al explorador ruso Stepan Krasheninnikov. Aunque no existen registros modernos de actividad, estudios geológicos documentan al menos 31 erupciones en los últimos 10.000 años, siendo la última alrededor del año 1550.

Expertos destacaron que este tipo de volcanes, formados por sucesivas capas de lava, ceniza y rocas, pueden acumular grandes cantidades de presión, lo que incrementa la posibilidad de erupciones violentas aun después de siglos de inactividad. La situación permanece en observación ante posibles réplicas sísmicas y nuevos episodios volcánicos.