Desde la sala de prensa de la Casa Blanca, Trump pintó un panorama de caos en la capital estadounidense, asegurando que los homicidios son más altos que en otras ciudades mundialmente conocidas por su violencia. “Hoy es el Día de la Liberación en Washington D.C. y vamos a recuperar nuestra capital”, prometió Trump en una rueda de prensa en la Casa Blanca, acompañado por parte de su gabinete.Aunque las cifras oficiales muestran una disminución de los delitos violentos en Washington, los republicanos siguen afirmando que la ciudad, gobernada por los demócratas, tiene altos índices de criminalidad y de personas sin hogar. Trump propuso medidas drásticas, al estilo de sus políticas migratorias en la frontera con México y de su respuesta a las protestas contra las redadas migratorias en Los Ángeles en junio pasado.

Medidas de emergencia
Trump detalló el despliegue inicial de 800 efectivos de la Guardia Nacional, un cuerpo de reserva, para “restablecer el orden público” en la capital, y advirtió que, “si fuera necesario”, movilizaría a las fuerzas militares. La fiscal general designada por el magnate, Pam Bondi, será la encargada de supervisar la toma de control federal, mientras que el comisario de policía interino será el director de la agencia antidrogas DEA, Terry Cole. “Empezamos con mucha fuerza en Washington D.C. y lo vamos a limpiar rápidamente, muy rápidamente”, afirmó en un mensaje en sus redes.

Para hacerlo, el presidente realizó una nueva orden ejecutiva donde invocó la sección 740 de la ley de Autonomía del Distrito de Columbia (Home Rule Act), lo que le permite poner al departamento de policía de la capital bajo control federal tras declarar una emergencia de seguridad pública en el distrito de Columbia. Sin embargo, la ley está pensada para dar control federal durante 48 horas en caso de una emergencia, el cual puede extenderse hasta un máximo de 30 días, con la obligación de notificar al Congreso. Pasado ese plazo, necesitará que se apruebe una legislación para mantener la medida. En sus redes, Trump citó un gráfico que compara la tasa de asesinatos en Washington con la de otras ciudades, las cuales consideró “las peores del mundo”. En 2024, la capital estadounidense registró 27,54 homicidios por cada 100.000 habitantes, un número que, según el presidente, es casi el doble de la tasa de Bogotá y superior a otras ciudades como Ciudad de México, Lima, Ottawa, París y La Habana. Según el mandatario, la policía y los fiscales no están siendo lo suficientemente estrictos en la lucha contra la delincuencia.