El comunicado de la familia de María Cash
“De la investigación llevada a cabo por personal especializado del Cuerpo de Investigaciones Fiscales de la provincia, se logró determinar que Romero fue la última persona que vio a María con vida, pese a lo cual y a que existen fuertes constancias y escuchas en la causa en donde el propio Miguel Segura, su jefe, refiere ‘después eso explicale vos el quilombo que tengo yo hoy en día por culpa de un chofer pelot… que ha hecho una cag…’, se encuentra en prisión domiciliaria.
Entre los argumentos de la jueza para sostener el beneficio se menciona que Romero posee una enfermedad grave, crónica y por su avanzada edad.
La familia no sólo cuestiona la decisión judicial, puesto que es la última persona que vio a María Cash con vida. Además, llama la atención que esté en prisión domiciliaria cuando ni siquiera se declara inocente, y se advierte todo un encubrimiento por parte del entorno de Romero, que incluye personajes políticos importantes de General Güemes.
Sumado a ello, en su declaración indagatoria no aportó mayores datos, se escudó en cuestiones tangenciales, como señalar que no sabía que la persona que había llevado era Maria Cash”.
Los detalles de la desaparición, según la causa
El comunicado continúa dando detalles sobre lo que consta en la causa respecto al día de la desaparición:
“En consecuencia, el día 8/7/11 a las 16.30 aproximadamente, Héctor Romero subió a Maria Cash al camión marca Mercedes Benz blanco con la leyenda “Catita” que conducía con la intención de mantener relaciones sexuales con ella, en cercanías de la rotonda de General Güemes, con dirección al sur. Después la llevó hacia un lugar en el que no pudiera ser visto a fin de concretar su objetivo y, ante la resistencia rotunda y vehemente de la víctima, le quitó la vida aprovechando la situación de debilidad, desorientación y vulnerabilidad en la que estaba María, y se deshizo del cuerpo.
Hasta el día de la fecha no ha sido encontrado el cuerpo de Maria Cash, lo que impide conocer con precisión la mecánica que provocó el desenlace fatal, pero permite asegurar la eficacia con la que su agresor ocultó el cuerpo, contando además con la ayuda de su entorno, que intentó (e intenta) encubrir lo ocurrido.
Sin embargo, la desigualdad entre víctima y victimario, sumado a las especiales circunstancias de vulnerabilidad de María al momento del hecho, que incrementaron exponencialmente su estado de indefensión, son las que dan sustento a la alevosía observada en la conducta típica, antijurídica y culpable de Romero”.
Por qué Héctor Romero no confiesa
A continuación, la familia utilizó una serie de subtítulos para responder preguntas respecto a la causa y a la detención de Héctor Romero:
Qué nos lleva a pensar que fue él
Mientras la imagen de María Cash inundaba los medios, Romero permanecía en silencio. Nunca comunicó a las autoridades que él la había subido al camión que conducía. Gracias a un testigo clave, Rene “Tucho” Torres, y a una investigación exhaustiva, pudo ser identificado.
¿Qué lo impulsó a callar?
Las incongruencias en las declaraciones de Romero generaron desconcierto entre los investigadores. Romero afirma que María subió a su camión sin mediar palabra, un hecho que contradice el comportamiento previo de la joven, quien siempre buscaba seguridad antes de aceptar el transporte. Tal cual surge de los diversos testimonios reunidos a lo largo de la investigación
Las versiones de Romero sobre el lugar donde recogió a María son contradictorias. ¿Por qué tanta imprecisión si conoce la ruta a la perfección?
¿Qué lo impulsó a detenerse?
Las razones de Romero para frenar fueron confusas, primero dijo “algo de la chica lo hizo frenar”, luego “no se pone a mirar cómo es la persona que hace dedo” y finalmente “no le llamó nada la atención”.
Romero cambia su versión sobre si reconoció a Maria Cash, primero la identifica, luego duda y finalmente niega haberle visto la cara. El aspecto de Maria, según Romero no coincide con las cámaras de Aunor, ni con los testigos.
Nilda Ruiz la describe: jeans, botas, cabello recogido. “Tucho” Torres la recuerda hermosa y prolija y las cámaras de Aunor lo confirman, llevaba el pelo recogido.
¿Dónde dejó a María?
Romero ha cambiado su versión sobre el lugar donde la dejó hasta en seis ocasiones. Primero dijo que la dejó en El Estanque, luego en Palomitas, después un poco antes de la Difunta Correa, luego al llegar a la Difunta Correa y recientemente, 20 metros antes de la gomería.
La familia Crespin que allí reside asegura no haber visto a María. El jefe de Romero declaró que Romero le dijo que la bajó por el mal olor, una versión muy diferente a la de Romero.
En las diversas oportunidades en que Romero declaró durante la lnvestigación, siempre sostuvo que María le pidió agua, y él no tenía por eso no le dio.
En la testimonial de David Romero, en cambio, el testigo declaró que su hermano, Héctor Romero, le comentó que ‘la mujer tenia mal olor y que le habría dado de beber agua que el llevaba en el camión.
Se infiere que la negativa al referirse a la botella de agua responde al instinto natural de quien busca negar y eliminar todo elemento que haya tenido contacto con la víctima y que pueda vincularlo al hecho.





