Los colegios electorales abrieron con normalidad este domingo a las 8, algunos con una pequeña demora, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, que elige representantes locales en unos comicios clave para el escenario político nacional.
A primera hora, la candidata a legisladora porteña por el PRO, Silvia Lospennato, denunció acompañada del expresidente Mauricio Macri que “se cometieron una serie de delitos graves” al referirse a un video generado con inteligencia artificial.
En el mismo aparece el ex presidente Mauricio Macri realizando una campaña sucia y Lospennato confirmó que “realizaron todas las denuncias correspondientes“.
Lospennato se refería a las imágenes que circularon en medio de la veda electoral previa a las elecciones legislativas en la Ciudad de Buenos Aires.
Trolls libertarios difundieron un video falso generado con Inteligencia Artificial que simula una declaración del expresidente Mauricio Macri, en la que supuestamente baja la candidatura de Silvia Lospennato y llama a votar al vocero presidencial Manuel Adorni.
La previa
El gobierno nacional juega fuerte, muy fuerte, porque ve la posibilidad de coparle la parada al PRO y de alimentar su mística de cara a los comicios de octubre. El partido amarillo, y muy especialmente su líder Mauricio Macri, afrontan una batalla compleja, que lo pone en riesgo en el que fue su bastión durante casi 20 años. Ambos sectores tendrán fugas por ex dirigentes propios que se presentan por afuera. El radicalismo, que también supo ser fuerte en el distrito, seguramente tendrá una cosecha menor, lo mismo que la Coalición Cívica. El kirchnerismo, en debacle a nivel país, está ante la oportunidad de ganar, no porque vaya a levantar su cosecha histórica sino por la fragmentación opositora. Ese es el escenario de las cruciales elecciones porteñas de este domingo.
Los cargos en disputa, 30 bancas de la Legislatura porteña, no es lo que le da importancia a estos comicios. Sino que la decisión del jefe de Gobierno de adelantarlos de los nacionales y la del gobierno de Javier Milei de poner toda la carne al asador los convierten en un mojón fundamental, determinante, de cara a las elecciones de diputados en octubre.
La disputa Milei-Macri es lo que sobresale porque hay una apuesta clara del gobierno: dejar en claro al electorado y también a la dirigencia amarilla que es la referencia exclusiva de la centroderecha y el antilkirchnerismo.
Para eso decidió nacionalizar la elección y jugar una ficha de peso: Manuel Adorni, primer candidato de la lista de La Libertad Avanza. El vocero presidencial fue una máquina de lanzar anuncios en la última semana de campaña.
“Adorni es Milei”, es el mensaje que se busca transmitir, lo que llevó al presidente a dar el discurso más importante del acto de cierre proselitista.
El funcionario aparece segundo en las encuestas, pero en LLA creen que el sprint final puede llevarlo a la cabeza de las preferencias. Atenta contra esa posibilidad que Ramiro Marra, fundador del partido pero luego expulsado por Karina Milei, vaya por afuera.
Silvia Lospenatto, la diputada nacional autora del proyecto de ficha limpia, es la primera candidata del PRO. La legisladora se victimizó por la caída en el Senado de esa iniciativa, que nunca fue del agrado libertario, en busca de un voto que en ciudad de Buenos Aires siempre tuvo espacio: el de los que le reclaman mayor transparencia a la política. Los “ñoños republicanos”, como descalificó Milei a esos sectores.
Mauricio Macri se le pegó como estampilla para apuntalarla, pero el PRO tiene dos problemas: la gestión de Jorge Macri y que su antecesor, Horacio Rodríguez Larreta, vaya por afuera.
En lo que alguna vez fue Juntos por el Cambio hay más fragmentación: el radicalismo de Martín Lousteau va con Lula Levy y la Coalición Cívica de Elisa Carrió con Paula Olivetto. Además, el MID, que en algún momento fue aliado de Milei, también presenta lista propia, con el director técnico Ricardo Caruso Lombardi a la cabeza.
En el peronismo también hay divisiones. Leandro Santoro, radical de origen, va por el PJ oficial y está primero en las encuestas, con un porcentaje de entre el 25 y el 30 por ciento. Pero también hay otras dos expresiones justicialistas: una encabezada por el morenista Alejandro Kim y el dirigente del Movimiento Evita Juan Abal Medina.
La crisis del peronismo, con la tensión entre Cristina Kirchner y Axel Kicillof en primer plano, puede llevar a que un triunfo convierta a Santoro en una figura que al menos deberá ser tenida en cuenta a la hora de plantear una estrategia nacional. También significaría un avance del padre de la criatura, Juan Manuel Olmos, un dirigente que viene intentando tender puentes de unidad entre los referentes del kirchnerismo.
El Frente de Izquierda y los Trabajadores (FIT), en tanto, buscará también cosechar en los sectores descontentos con la política económica de Milei, con una lista encabezada por Vanina Biasi.
La elección se desarrollará con voto electrónico, entre las 8 y las 18. Estiman que el porcentaje de participación será bajo, como ya pasó en los comicios provinciales que hubo hasta ahora, el primero de ellos en Santa Fe. Se espera que a las 19 comiencen a conocerse los resultados.
Fuente: Rosario3