La Justicia de Córdoba condenó a prisión perpetua a Brenda Agüero, la enfermera acusada de provocar la muerte de cinco recién nacidos en el Hospital Materno Neonatal Ramón Carrillo. El fallo, dictado tras el veredicto de un jurado popular por amplia mayoría, consideró a la mujer de 29 años culpable de “cinco homicidios calificados por aplicar método insidioso” y “ocho tentativas de homicidio calificadas por aplicar método insidioso”.
De acuerdo con la acusación, los crímenes fueron cometidos mediante inyecciones de potasio que desencadenaron el fallecimiento de los bebés. Los fiscales Sergio Ruiz y Mercedes Ballestrini habían solicitado la pena máxima, sosteniendo que existieron pruebas suficientes de la responsabilidad de Agüero en los hechos.
Junto a la enfermera, la exdirectora del hospital, Liliana Asís, fue condenada a cinco años de prisión por el delito de encubrimiento agravado. Por su parte, otros cinco acusados resultaron absueltos por el tribunal.