En una noche que quedará grabada en la memoria del rock británico y argentino, Oasis regresó este sábado al Estadio Monumental después de 16 años y ofreció un show arrollador ante más de 85.000 espectadores. La vuelta de los hermanos Liam y Noel Gallagher, largamente esperada e impensada hasta hace apenas unos meses, se concretó en el marco de la gira Live ’25, que celebra los 25 años del icónico álbum (What’s the Story) Morning Glory?.
La expectativa se sintió desde temprano: miles de fanáticos comenzaron a acercarse al estadio desde la tarde y para el anochecer ya no quedaba un lugar libre. A las 21.30, el estallido fue total cuando la banda apareció en escena y abrió la noche con “Hello”, el comienzo perfecto para un reencuentro cargado de nostalgia, energía y emoción.
A lo largo del show, Oasis repasó gran parte de su discografía y ofreció una lista de clásicos que hizo vibrar al Monumental. Sonaron “Acquiesce”, “Some Might Say”, “Supersonic”, “Roll With It”, “Little By Little”, “D’You Know What I Mean”, “Stand By Me”, “Cast No Shadow”, “Slide Away”, “Whatever”, “Live Forever”, “Don’t Look Back in Anger” y, por supuesto, “Wonderwall”, uno de los momentos más emotivos de la noche, coreado por todo el estadio.
El cierre llegó con una ovación ensordecida que se extendió varios minutos y que evidenció la magnitud del regreso. Para muchos, fue la oportunidad de reencontrarse con una banda que marcó a toda una generación; para otros, la primera vez de ver a Oasis en vivo. En ambos casos, la sensación fue unánime: el Monumental volvió a latir al ritmo de un fenómeno que sigue siendo histórico.

