En un firme llamado a la comunidad internacional, el papa León XIV instó a los líderes del mundo a sentarse a dialogar y poner fin a los conflictos armados. “La Iglesia no se cansará de repetir: que callen las armas”, expresó durante un discurso dirigido a representantes de las Iglesias Orientales.

Robert Prevost, elegido como nuevo pontífice el pasado 8 de mayo, sostuvo que hará todo lo que esté a su alcance “para que esta paz se extienda” y destacó que “la Santa Sede está disponible para que los enemigos se encuentren y se miren a los ojos, para que se devuelva a las personas la esperanza y la dignidad que merecen”.

“El pueblo quiere la paz y yo, con el corazón en la mano, les digo a los líderes del pueblo: ¡reunámonos, hablemos, negociemos! La guerra nunca es inevitable, las armas pueden y deben callar, porque no resuelven los problemas, sino que los aumentan”, afirmó.

El mensaje del Papa llega en un momento clave, en la previa de un encuentro entre representantes de Rusia y Ucrania que se realizará en Turquía. Si bien aún no está confirmada la participación del presidente ruso, Vladimir Putin, su par ucraniano, Volodímir Zelenski, ya manifestó su voluntad de asistir y entablar un diálogo directo.