Un misil lanzado por Irán impactó este jueves en las inmediaciones del hospital Soroka, en Beersheva, al sur de Israel, causando daños materiales en el centro médico, aunque el gobierno iraní negó que ese fuera el objetivo del ataque. Según informó la agencia estatal IRNA, el verdadero blanco era una base de telecomunicaciones militares y una instalación de inteligencia del Ejército israelí.
El hecho se produjo durante la mañana y generó gran conmoción, luego de que diversos medios locales e internacionales reportaran inicialmente que el hospital había sido alcanzado de manera directa por el proyectil y había sufrido “daños considerables”. No obstante, voceros iraníes salieron al cruce de estas versiones y aclararon que el Soroka se vio afectado por la onda expansiva de la explosión.
De acuerdo al reporte de IRNA, el misil tenía como objetivo el cuartel general del cuerpo de telecomunicaciones C4I y una sede de los servicios de inteligencia en la región. Mientras tanto, autoridades israelíes evalúan los daños y refuerzan las medidas de seguridad en zonas sensibles del sur del país.
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