Ante el impacto de la reciente devaluación en todo el territorio nacional, los taxistas en la provincia de Tucumán han decidido solicitar un nuevo ajuste en las tarifas de sus servicios. A menos que el Concejo Deliberante de la ciudad apruebe un aumento del 50%, el sector ha confirmado su intención de presentar una solicitud formal.

En el mes de julio, el costo inicial de la tarifa (conocido como “bajada de bandera”) se incrementó de $120 a $180, y cada tramo de 100 metros de recorrido tuvo un valor de $18. Ante la actual crisis económica y el aumento en el precio de los combustibles, la Federación Nacional de Conductores de Taxis ha anunciado que llevará a cabo una reunión este martes para evaluar la situación.

Aunque el resultado de la reunión aún está por determinarse, se estima que la solicitud de aumento podría situarse entre un 50% y un 60%. Esto significaría que el costo de la bajada de bandera podría llegar a los $270, en caso de ser aprobada la medida.

“No nos olvidemos que las otras actividades cerraban cada seis meses y ahora lo hacen mes a mes. Entendemos que es duro para el usuario y la sociedad pero tenemos familias que sostener”, expresó Julio Rodríguez, representante del sector.