En medio del reclamo de los médicos del Hospital Garrahan, que piden mejoras salariales y condiciones de trabajo, el Gobierno Nacional aseguró que el centro de salud no está desfinanciado y que, por el contrario, el problema es que hay demasiados empleados administrativos en relación con los médicos.

Además, desde la Casa Rosada deslizaron que los profesionales que atienden a niños enfermos montaron esta medida como una reacción a que el Ministerio de Salud colocó el sistema biométrico en el hospital para registrar sus ingresos y egresos.

La Argentina es un país donde hace mucho tiempo que los médicos deberían ganar más; los policías y los docentes, también”, dijo Adorni, que inicialmente consideró “entendible” que los doctores se quejen por los sueldos.

“Negarlo sería no entender lo que pasa y lo que viene pasando desde hace muchísimo tiempo”, comentó y dijo que, por eso, el Gobierno se decidió a terminar con la inflación, “que era lo que más erosionaba el salario”.

Según anunció, esta administración quiso organizar la cuentas del establecimiento pediátrico de referencia. “El Garrahan tiene equilibrio financiero y sus cuentas volvieron a estar en orden después de diez años en los que aumentaron 59% los cargos jerárquicos para favorecer a la propia política”, aseguró.

A la vez que se quejó de que supuestamente durante la gestión de Alberto Fernández se crearon 1200 empleos nuevos, lo que derivó en que ahora haya 953 administrativos y 478 médicos de planta.

“Dos empleados administrativos por cada médico”, calculó, mientras los residentes denuncian, entre los principales problemas, que tienen el sueldo estancado en $797.061 para jornadas de más de 60 horas semanales.