Según prueban documentos judiciales en Guatemala, Honduras y los Estados Unidos, Federico Machado tuvo relaciones comerciales con César Gastelum, el principal operador en la última década de Joaquín Guzmán Loera, el “Chapo” del Cártel de Sinaloa.
Tras del escándalo político en Argentina que lo relaciona con José Luis Espert, las investigaciones sobre Machado se hicieron masivas y por estos días llegan a la prensa argentina.
Esos papeles revelan que el 16 de noviembre de 2019, Gastelum transfirió el avión matrícula estadounidense N311BD a una compañía llamada Aircraft Guaranty Corporation (AGC), una de varias con las que Machado estuvo relacionado como propietario o socio y la cual está listada en el proceso civil abierto en 2020 en Florida, Estados Unidos, en contra el argentino por personas particulares y empresas que lo acusan de estafarlos como parte de un esquema para lavar dinero.
Espert viajó en uno de los aviones de Machado y habría recibido dinero de una mina guatemalteca de su propiedad, investigada porque ahí desembarcaban cargamentos de cocaína de Sinaloa gestionados por Gastelum.
El 17 de febrero de 2020, autoridades de Belice decomisaron el N311BD con 2,310 kilos de cocaína según un informe de la policía beliceña citado en el proceso estadounidense, que publica el diario Clarín. Un mes después, el 14 de marzo, Gastelum adquirió el avión de nuevo.
La investigación revela que César Gastelum, operador del “Chapo”, se vinculó con una de las compañías de Machado para disfrazar la propiedad de un avión en la que Sinaloa movía drogas por Centroamérica.
Gastelum fue, según fichas policiales en Estados Unidos, el principal contacto de Sinaloa con narcos guatemaltecos en Guatemala y Honduras desde finales de la primera década de 2000.
En Honduras, fue él quien proveyó alrededor de un millón de dólares para sobornar al expresidente Juan Orlando Hernández y garantizar el acceso del Cártel a los principales puertos de Honduras según establece un documento introducido por la fiscalía estadounidense en el juicio en Nueva York que terminó el 8 de marzo de 2024 con la condena a Hernández por narcotráfico.
Uno de los diputados guatemaltecos que participó en aquella comisión, y quien habló desde el anonimato por su seguridad, aseguró que Machado utilizaba la mina, propiedad de la empresa Minas del Pueblo, para que aterrizaran aviones cargados con cocaína y para almacenar cargamentos que llegaban a otros aeródromos en el sur del país, en la frontera con Honduras. Fue Minas del Pueblo la que transfirió USD 200,000 a Espert.

