Sánchez también se refirió a la situación política en Tafí Viejo, donde —según explicó— la intendenta intentó alejarse del pacto con el oficialismo y “fue asfixiada económica y financieramente hasta que volvió a alinearse”. Para el dirigente, este tipo de maniobras refleja “un esquema de poder que castiga la disidencia”.

En otro tramo de la entrevista, advirtió que “hay muchos candidatos que no van a asumir” y remarcó la necesidad de poner fin a las prácticas políticas que condicionan la voluntad de la gente.

Respecto de la situación económica actual, Sánchez señaló que “la gente no llega a fin de mes” y que su espacio busca “dar herramientas para garantizar gobernabilidad, defendiendo especialmente a jubilados, personas con discapacidad y sectores vulnerables”. Además, mencionó que la situación económica “está estancada” y que Tucumán “tiene la segunda presión fiscal más alta del país”.

“Nosotros vamos a seguir apoyando las medidas que beneficien a los tucumanos, pensando en los derechos de los trabajadores, pero también impulsando cambios profundos, como reformas impositivas”, afirmó. También aclaró que su espacio político no recibe órdenes sobre cómo votar en el Congreso y adelantó que acompañarán iniciativas como la baja de retenciones a la soja, para aliviar al sector productivo.

“Queremos una Tucumán libre de aprietes, con una economía más justa y con instituciones fuertes”, concluyó Sánchez.