“La medida consiste en que de cada diez colectivos, va a andar nueve. Es una forma de bajar costos y ganar algo de tiempo para buscar soluciones. No es algo grato, pero es lo que hoy nos toca hacer”, explicó Berreta.

Según detalló, la crisis se profundizó por el aumento del 35% en los costos operativos y la caída en la cantidad de pasajeros transportados. “Nos comimos el capital, ya no hay margen. Necesitamos una solución coyuntural y transitoria. Si aplicáramos la fórmula histórica —dividiendo los costos entre los usuarios—, el boleto sería impagable”, advirtió.

Berreta precisó que la provincia sigue pagando los subsidios por kilómetro recorrido, y destacó que la tecnología permite controlar el cumplimiento de los recorridos. Sin embargo, cuestionó la falta de acompañamiento del municipio:“Valoramos la inversión que hizo la provincia y las unidades nuevas, pero el municipio no quiere acceder a nuestro pedido. Desde la pandemia no logramos recuperarnos”.

El empresario propuso que se convoque a una comisión de costos de la UNT para auditar la situación económica del sector:“Si lo hacen, se van a dar cuenta de que no llegamos. Estamos sin poder coordinar acciones entre las empresas y el tránsito es un caos, parece Asia o China. Es una locura”.

Berreta señaló además que de las 14 líneas, 13 participaron del último encuentro del sector, y negó versiones de presuntas amenazas o extorsiones: “Eso no existió. Todos estamos de acuerdo en que, si no se hace algo pronto, en pocos días no vamos a poder seguir”.

En relación al gremio de la UTA, confirmó que las suspensiones serán de cuatro días por persona, y que el tema será tratado este mediodía en la Secretaría de Trabajo, en una reunión conjunta entre AETAT y el sindicato.“La mejor línea hoy es la 19, y aun así perdió el 35% de sus pasajeros. Eso demuestra que el problema no es el servicio, sino la situación económica general”, concluyó Berreta.