El presidente del BCRA, Santiago Bausili, enfatizó: “No hubo ninguna medida tomada hoy. Lo que ocurrió fue que detectamos entidades no autorizadas realizando operaciones de cambio para personas humanas”.
Qué pasó con las billeteras
El primero en dar a conocer la situación fue Ariel Sbdar, titular de la billetera Cocos, quien explicó: “Nos pidieron apagar”. Luego detalló que, por pedido de su proveedor de dólar oficial, suspendieron momentáneamente la operatoria, aunque continuaron ofreciendo dólar MEP y el resto de los servicios con normalidad.
Según pudo saber , ese proveedor sería el BIND Banco Industrial S.A., entidad que proveía el servicio cambiario a distintas billeteras. Desde el banco, sin embargo, evitaron hacer comentarios. En paralelo, comenzó a circular que empresas como Ualá y Mercado Pago también habían enfrentado la misma situación.
Cabe señalar que Cocos está en proceso de adquirir el banco Voii y Mercado Pago ya solicitó licencia bancaria, lo que podría habilitarlas a operar divisas de manera oficial.
La postura del Banco Central
Para despejar rumores de un regreso del cepo, el BCRA emitió un comunicado donde afirmó: “No hay ningún cambio normativo para la compra de divisas por parte de las personas humanas, quienes podrán seguir accediendo al MLC a través de bancos y entidades autorizadas. La compra-venta de dólares solo puede canalizarse por esas vías; no está permitido tercerizar las operaciones”.
De esta manera, la autoridad monetaria reiteró que las billeteras virtuales, al no contar con licencia bancaria, no pueden ofrecer dólar oficial directamente a sus clientes.
Contexto de tensión cambiaria
El episodio se dio en una jornada de alta volatilidad: subieron tanto el dólar oficial como los paralelos, mientras que bonos y ADRs sufrieron fuertes caídas.
Los temores en el mercado obedecen al endurecimiento de las restricciones en las últimas semanas. Desde que se liberó el cepo para personas humanas en abril, la demanda promedió u$s3.584 millones mensuales. Casi la mitad se canalizó a cuentas en el exterior, alimentando maniobras de arbitraje entre el dólar oficial y el financiero.
Frente a ello, el Gobierno primero prohibió que directivos y gerentes de empresas financieras realizaran este tipo de operaciones, y poco después extendió la restricción a todos los individuos.

